lunes, 13 de agosto de 2012

Me elijo a mí.

[Hablemos de la valoración indefinida]
Hay cosas que yo me guardo por temor a que otros las escuchen:



Pero acá voy:

No le temo a elección.
A caminar sin pareja.
Ni a sentirme libre o segura. 

No le temo a mi sombra aunque le falte claridad.
Ni a los versos tristes que me salen por iniciativa propia.

No le tengo miedo a las copas de vino o el Marlboro Rojo.
"Sé que te excita pensar, hasta donde llegaré"

Puedo hablar del infinito y las fechas importantes. 
Seguir sonriendo lentamente por cada segundo que pase.

Encontrarme entre mil abismos. 

Quiero enamorarme, desvestirme, acariciarme, escribirme, cantarme, pensarme, comprarme cosas, llevarme al cine, besarme lento y rápido [según lo decida el alcohol y el deseo], ponerme roja, tomar mi mano, llorarme, molestarme sin razón y luego disculparme, hacerme comida a las tres de la mañana si es que me pega el hambre, decirme un millón de veces que soy hermosa, quiero elegirme, quiero escogerme. 

Y lo hago.

No se tú, pero yo..





No me cambio por nada.







<<Me quiero>>

2 comentarios: